Termina de este modo, una pesadilla que ha durado cinco días con sus noches. Comenzó el pasado miércoles por la tarde: Noelia salió de casa para asistir a las clases de la academia de peluquería en la que está aprendiendo el oficio. No volvió. Tampoco Jordi fue a dormir aquella noche a la casa de acogida. Ambos huyeron juntos. Al parecer, hace unos días, el chico escuchó que los responsables del centro querían trasladarlo a otra sede fuera de la provincia, según el padre de la chica. Ese pudo ser el detonante para que los adolescentes decidieran marcharse. Nada se sabía de ellos. El teléfono de Noelia estaba apagado y ni tan siquiera envió un mensaje a su familia para tranquilizarlos.
Noelia salió de casa con lo puesto. Iba vestida con unas mallas moradas y estampadas y un chaquetón marrón con tejido “de borreguito”. Como todos los días, llevaba una mochila con sus cosas de clase: “Pensamos que pudo coger alguna ropa más”, explica José Alberto González. La chica tampoco llevaba dinero; apenas 20 euros que le había dado su madre para comprarse unas zapatillas esa misma mañana.
Estos cinco días han sido dramáticos para la familia. El padre ha buscado hasta debajo de las piedras. Habló con los amigos de su hija para tratar de descubrir cualquier detalle que le permita llegar hasta ella. “Algunos me dijeron que la vieron dos tardes seguidas en el Jardín Botánico. Pasé las noches allí por si ellos estaban durmiendo en el parque. También han llamado diciendo que estaban en Martos, pero no fue una pista fiable”, relata el padre. Ayer mismo, la búsqueda se amplió por toda España. Y, finalmente, dio resultado. Noelia y Jordi estaban en Córdoba “sanos y salvos”.
José Alberto González da las gracias a todos por vuestra colaboración y feliz de que los chicos están a salvo .
No hay comentarios:
Publicar un comentario